RESUMEN DEL PARTIDO

Doce años después de cenar en Rodizzio, de recibir el diploma del secundario. Y también, por supuesto, el trofeo de campeón del torneo de fútbol, el equipo "los coje lacra" se volvió a juntar.. y como suele suceder, quedó claro que los años se encargaron de erosionar su cuerpo. Y a diferencia del buen vino, cuanto mas viejo, peor es el olor que sale cuando se mueve.

Vino Fede y demostró que se puede ser hermano de Nacho y pisar la pelota.
Massi nos mostró una vez más que es un ídolo en decadencia, entregado a las drogas baratas. Juancito hizo malabares y grandes jugadas.
Pablo hizo malabares en un semáforo antes del partido. Después, tocó mas pelotas con la mano que con el pié. No es horrible como dicen uds., lo que pasa es que no conoce las reglas del juego. Tampoco conoce las reglas de convivencia y de buen gusto por el deporte.
Nutria dió clases de definición, tanto que sus goles ya se publican en el diccionario.
Nacho recibió muchas patadas de pablo, y un corte de pelo espantoso de su peluquero.
El mono juegó horrible, pero qué buen recital.
Homero hizo una bella jugada comenzado el partido, después se vió limitado por su estado físico y por la escasa aerodinamia de su peinado Fort.

PERLA BLANCA

Regal jugó como nunca (bien). Hizo goles, metió caños, distribuyó juego, ordenó al equipo y no metió goles en contra. Se comió un caño bello de Fer, pero después lo devolvió. Como el speed en aquella noche en la puerta de Moliere.

Por su gran actuación, se lleva la perla blanca..

... pero por algún extraño motivo, cuando vemos a algiuen de Racing recibiendo un premio, siempre es en blanco y negro. 

PERLA NEGRA

El el Fabbiani de LP. Gordo, bobo y peleador. No mete goles. Toca la pelota con la mano y pega patadas desalmadas. Juegó bien, pero que después de pegar patadas y jugar la pelota con la mano se ofenda, es digno de perla negra. En este caso, no es por destreza futbolística. Si fuera por ello, ni siquiera debería levantarse un sábado. La perla se la lleva por antifútbol, por ofenderse, por faltar al trabajo, por boludo, y por no estar "ahí", cuando lo esperamos con Maxi. Porque pasaron los años, y nunca dejó de ser "el boludo de Martínez".